Belfort se encuentra en uno de los departamentos más pequeños de Francia, llamado “Territoire de Belfort”, entre los Vosgos y el Jura.
La ciudad está en una meseta, en medio de una gran diversidad de paisajes de lagos y montañas donde los amantes de la naturaleza pueden practicar numerosas actividades al aire libre.
El río “La Savoureuse” que la atraviesa tiene su fuente en el Ballon d’Alsace a 1200 metros de altitud.
En la parte antigua de Belfort, se alza la imponente ciudadela. Fue construida en el siglo XII y posteriormente fortificada por Vauban en el siglo XVII. Se puede visitar el paso subterráneo que ofrece proyecciones en video, que cuentan su historia.
La puerta de Brisach es una entrada a la ciudadela. En el frontón, se puede ver ornamentos como flores de lirios, una corona y un sol para celebrar la magnificencia del rey Louis XIV y el lema del rey: “Nec pluribus impar” (por encima de todos).
Debajo de la Ciudadela, el León es el símbolo de la ciudad. Esta escultura de gres rosa de los Vosgos, de 22 metros de largo y 11 metros de alto, inspirada de las estatuas egipcias, es obra de Augusto Bartholdi. Fue erigida para conmemorar la resistencia de Belfort durante la guerra de 1870.
En la Tour 41, El Museo de Bellas Artes presenta una importante colección de esculturas de Rodin, pinturas de Courbet y de grabados de Dürer.
En el centro de la ciudad, se encuentra la “Place d’Armes”. Creada hacia 1690 era entonces un espacio militar. Hoy es un punto de encuentro en la villa antigua. Fue remodelada en 2013.
Alrededor de la plaza, se encuentra el ayuntamiento en un bonito inmueble del siglo XVIII, y la catedral de Saint Christophe construida con gres rosado, también del siglo XVIII.
Al otro lado del río, el Museo de Arte Moderno, inaugurado en 1999, alberga un conjunto de 150 pinturas y esculturas del siglo XX, de grandes artistas como Picasso, Léger o Braque, donados a la ciudad por Maurice Jardot.
La gastronomía de Belfort es la de la región del Franco-Condado, con algunas especialidades del Territoire de Belfort como “l’épaule du Ballon”, una paletilla de cordero deshuesado con un relleno a base de arándanos o, de postre, el “Belflore”, un delicioso pastel con merengue almendras y avellanas con una base de frambuesas… o el «Téméraire» con manzanas, peras, uvas y avellanas, asi llamado en conmemoración de la estancia de Carlos el Temerario en la región…
Muy interesante y bonito. Podrías poner un mapa con la localización, es sólo una sugerencia.
¡Muchas gracias, me alegro de que te guste! El Franco-Condado es una región muy bonita. Lo del mapa estaría bien… pondré un enlace. Un saludo.