
La región del Franco-Condado, en el este de Francia, con sus bosques y sus cascadas es de una gran belleza.
Las cascadas del río Hérisson constituyen uno de los lugares más bonitos del Jura.
El río Hérisson nace a 805 metros de altitud. En la Meseta de Doucier, un desnivel de 280 metros da lugar a siete cascadas y 31 saltos ofreciendo paisajes espectaculares. Un sendero permite de disfrutar de un paseo inolvidable. En periodo de lluvia, las cascadas son particularmente grandiosas, pero en invierno se transforman en cascadas de hielo.

La cascada del Abanico, escalonada, con 65 metros de altura es quizás la más conocida.

En la cascada del Gran Salto, llamada “Queue de Cheval” (Cola de Caballo), el agua cae directamente desde una altura de 60 metros

En el salto de la Forge el agua cae desde una pared rocosa

El salto del Molino se encuentra cerca de las ruinas de un antiguo molino.

El Gour Bleu es una cascada que alimenta una poza de agua azulada y transparente.